Tu Hijo No Es Impulsivo Por Inmadurez (Según Estudios Científicos)

¿Sabías que las locuras que hacen los adolescentes según varios estudios científicos NO SON DEBIDO a la inmadurez? Ya que incluso los niños llegan a ser más prudentes que los mismos puertos.

 

Entonces ¿Por qué tienen esas actitudes que convierten esta fase de su vida en la más difícil para los padres? Bueno, el psicólogo Rafa Guerrero hace una distinción muy importante con respecto al cerebro del adolescente y esto es muy importante entenderlo para ser más empáticos y solidarios con nuestros hijos adolescentes.

 

El psicólogo menciona que el cerebro adolescente está en un proceso de adaptación y hace un símil a cuando nuestros dispositivos electrónicos (la tableta, el celular o la computadora) se está actualizando y así como tú no puedes usar tu celular mientras se actualiza los jóvenes tampoco pueden acceder a muchas funciones de su cerebro mientras están en esta etapa, específicamente a la corteza prefrontal, ahora tú me dirás ¿qué es la corteza prefrontal? Podría resumirse como la parte de nuestro cerebro que se encarga de controlar las emociones y tiene mucho que ver con la fuerza de voluntad, además de que maneja gran parte del razonamiento, en resumen, es la parte “analítica” de nuestro cerebro, no es que no estén usando su cerebro, si no que su cerebro se está actualizando

De repente nosotros pensamos que nuestros hijos son impulsivos, reactivos e inmaduros y lo que pasa es que la corteza prefrontal se está actualizando y no la pueden usar al 100%, así como nosotros cuando teníamos su edad.

 

Esto también lo explica detalladamente un estudio realizado en el Weill Cornell Medical College de Nueva York (EE.UU.).

 

Un grupo de científicos analizó el cerebro de 83 personas con edades comprendidas entre 6 y 29 años. Estos debían observar una serie de rostros en un ordenador y pulsar un botón cuando su expresión les resultara amenazante.

 

Los investigadores monitorearon la actividad cerebral de la corteza prefrontal (PFC) región implicada en la función de contención y descubrieron que los adolescentes tenían mayor dificultad para detectar el gesto amenazante de una persona. Registraron además una gran diferencia entre géneros siendo los hombres los que erraban con más frecuencia. De ello se deriva que el cerebro de los adolescentes tiene que hacer un esfuerzo adicional para distinguir una situación peligrosa y contener una reacción agresiva.

 

En esta etapa nuestros hijos van a preferir estar más con sus pares que con nosotros, van a querer que los vean con gente de su misma edad y formar parte de grupos de amigos en su escuela y por el otro lado nosotros como papás debemos estar en una posición de apertura, de estar presentes, no de tomar las decisiones por ellos si no que dejar que su autonomía también florezca, que empiecen a tomar decisiones y a asumir las consecuencias de esas decisiones.

 

Seamos empáticos con nuestros hijos, viven una etapa difícil, su cerebro se está actualizando y en ocasiones no está al 100% en sintonía con sus emociones, con sus intereses. De ahí que en ocasiones no saben lo que quieren, así tal cual nos pasó a tí y a mí que ya pasamos por esa etapa.

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